LIBRO II
La
publicación del libro me ha proporcionado
muchos episodios de felicidad y confirmaciones.
Influye
mucho el hecho de que es un éxito de ventas.
Encargué una tirada de 500 libros y he tenido
que reeditar. En el momento de la presentación, se agotaron los libros puestos
a la venta y se formó una cola larga de gente que pedía mi firma.
En Ciutadella, día 19 de abril, el salón de
plenos del ayuntamiento (foto “adornada” con lluvia de libros), se quedó
pequeño. Según una librería que vendía en ese momento, nunca habían visto tanta
gente en la presentación de un libro.
Conté con una presentación inicial de mi amiga
Ryma, venida aposta de Barcelona por unas horas, que expresó de forma muy
sentida su sensación por el libro, dándole mucho valor a la labor callada de mi
esposa; después intervine con un PowerPoint, que leyó mi amiga Iosune, que
también coordinaba el acto, en el que intervino la Consejera del gobierno
Insular, responsable de bienestar social y con palabras atinadas y sinceras.
Esta persona es la que dio el empuje económico a la producción del libro;
también intervino una representante de la Asociación ELA de Baleares,
destinataria de los beneficios de la publicación. Cerró el acto nuestra
alcaldesa, con unas palabras amables sobre el libro y mi persona.
Luego surgió la sorpresa que había elaborado,
cuando intervino mi amigo Bep Gener, cantando un par de canciones muy
conocidas.
Al día siguiente, presenté el libro en Mao,
ciudad situada en la otra punta de la isla, fue muy bien y se vendieron muchos
libros, pero el público era escaso. Sin embargo, acudieron cinco compañeros de
la Caixa, visita que agradecí mucho.
Aparte de las dos presentaciones en Menorca,
esta semana, tengo previsto presentar en dos ciudades de Mallorca, la isla
vecina, y mi amigo Mariano me está organizando una presentación en Ibiza, en el
mes de mayo. Así completaré una visita a las tres islas del archipiélago
Balear. Y quedaré pendiente de que surjan oportunidades para promocionar el
libro, en la península (Barcelona y Málaga).
Nunca había pensado que sería tan popular,
porque me paran por la calle para darme la enhorabuena por el libro y he
llegado a atender una señora que me pedía una dedicatoria en el libro, cuando
estaba descansando en una terraza. Como si fuera un escritor consagrado.
Precisamente porque no lo soy, no tengo las ventajas disfrutadas por un literato
conocido, aportadas por una editorial que realiza toda la faena posterior a la
parte creativa. Y he tenido que hacer todo el trabajo de promoción del libro y
su venta. Cuando releo esta última frase, me lamento de que el lenguaje sea tan
limitado, porque una frase no puede explicar todo el trabajo que conlleva
promocionar y vender el libro, aunque he disfrutado mucho haciendo esta tarea,
a pesar de que esta ocupación, no me ha permitido hacer ejercicio ni andar con
triciclo.
Ya conté la fatal caída del mes de marzo. Lo que
no conté, es que, durante tres años consecutivos, en el mes de marzo, he tenido
una caída seria.
Y tuve la mala suerte de caer en casa, justo
antes de salir para la primera presentación, con el resultado de una brecha en
la parte posterior de la cabeza, con abundante sangre. Mi esposa sugirió acudir
al centro sanitario para curarme, pero me negué porque significaba anular la
presentación y eso no lo quería hacer. Después se vio que tenía razón.
Así
que me fue a realizar la presentación, con un apósito que detenía la sangre y
los asistentes a la exposición sobre el libro, no lo notaron.
Al final de la jornada, mi mujer me acompañó a
la clínica donde me dieron tres puntos de sutura.
En
cuanto a mi día a día con la enfermedad, ha quedado muy claro que, si no actúo
más lentamente, la caída es segura. Además, en algunas ocasiones, eso no basta.
Porque, en algunas actividades además de ser más lento, necesito hacerlo a
plena conciencia (mindfulness). Por eso, la semana pasada, me caí de espaldas
entrando a la farmacia habitual, que tiene un finísimo escalón a la entrada.
Siempre había superado ese pequeño peldaño y no le di la importancia que tiene,
topé con él y, para evitar caerme hacia adelante, produje la caída hacia atrás.
A
mi esposa, siempre le digo, que cuando me pregunte algo, tiene que hacerlo con
solo una pregunta, para que pueda contestar si o no. Es muy habitual que me
haga la doble pregunta… ¿quieres pescado o carne? Para mí es difícil contestar
y necesito hacerlo con el móvil. Si me preguntara si quiero carne, seria fácil
decir si o no, aunque sea gesticulando y ella sabría a que atenerse con una
sola pregunta. Aunque reconozco que no es fácil.
Otra
consecuencia negativa de la enfermedad, es que estoy dejando las reuniones y comidas
de amigos, porque ellos se reúnen para hablar y comer, y no puedo hacer ninguna
de las dos cosas.
Si
queréis adquirir el libro, pasadme un mensaje por WhatsApp al 616054998 y
facilitarme vuestra dirección postal (si sois de fuera de la isla) y nos
pondremos de acuerdo.
Termino
esta publicación corta, por falta de tiempo, con frases del libro Dimensiones
creativas del sufrimiento, del psiquiatra A.M. Ghadirian.
“Dotar la vida de sentido cuando
se está inmerso en una crisis y derivar significado de ello, constituyen dos
rasgos principales de la resiliencia.”
“Uno de los usos de la
resiliencia, es la reconfiguración, esto es, reconfiguración del pensamiento
personal y de la conducta, para adaptarse al trauma.”
“La enfermedad puede actuar como
un punto de no retorno. En cualquier caso, a fin de desarrollar la creatividad,
han de estar presentes otros factores: entre ellos, la imaginación, el talento
innato y las habilidades.”
“Las experiencias traumáticas suelen hacer referencia asimismo al proceso
de la creatividad.”
Excelente artículo el de hoy, Climent, impresionantes los detalles. Veo que este magnífico proyecto ya lo has regado con sangre en tres sitios --tu casa, el lugar de la presentación y el Centro de Salud-- así que ¡cómo no va a tener éxito! Felicidades, Climent, por tu empeño por sacar este libro adelante y por tu resiliencia, buen humor y el sentido que tiene tu vida con el que dotas todo lo que haces.
ResponderEliminarSintonizo con tu preferencia por las preguntas simples en vez de dobles; yo además tengo alergia a las frases que contienen tres o más negaciones, porque acaba uno perdiendo la pista de lo que quieren decir -- por ejemplo: "nunca olvidaré que nadie me negó su ayuda".
Un abrazo, y sí, claro que quiero comprar tu libro. Tu amigo Nabil