PUENTES

 

Terminé mi última publicación, recordando a Ucrania, en realidad, era un recuerdo por los ucranianos. Y, en esta ocasión, comienzo hablando nuevamente de esta guerra.

Porque pienso que todos podemos aportar algo. Ningún esfuerzo, por minúsculo que sea, a favor de la paz, es baldío. Pienso además,  que es una responsabilidad compartida.

Sí. Como mínimo, estar correctamente informados. Identificando bulos y noticias falsas, es decir, investigando la verdad, sin que importe adónde nos lleve la búsqueda, apostando por la indagación honrada y no importando las consecuencias.

Con el avance tecnológico, existen muchas posibilidades de tergiversar la realidad. Se trata de una secuela indeseada, de ese progreso tecnológico humano.

Si todos fuéramos ciudadanos críticos y responsables, no habría la posibilidad de falsear la verdad. Y, según mi parecer, ese debería ser nuestro compromiso.

Creo no equivocarme al afirmar que las tres o cuatro generaciones que vivimos actualmente, hemos visto más cambios en el mundo, de los vistos en uno o dos siglos. Sólo imaginar a nuestros abuelos (de los que tenemos más de 50 años), viviendo en el mundo de hoy, constataremos los cambios por los que ha pasado la humanidad.

Además, tenemos en nuestras manos, terminar con nuestra especie (descontrol tecnológico, apagón digital, tercera guerra mundial…) o ser más avanzados y unidos que nunca, portando prosperidad para todos.

Yo creo en lo último, pero no desde una posición de ingenuidad, sino convencido de que no hay alternativa.

Independientemente, tengo a las víctimas presentes en mis oraciones.

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De mí día a día, se confirma que me recupero pronto de las consecuencias de las caídas. Estoy muy recuperado, me molestan las costillas, pero el enorme moratón que me apareció a la semana de caer, ya no lo tengo.

Se da la circunstancia, de que encontré un familiar sanitario por la calle y se sorprendió de mi buen aspecto, hasta el punto de, al cabo de unos días, supe que esa persona había dicho que no podía ser que me hubiera roto cinco costillas, que estaba demasiado bien. 😊

Incluso le tuve que hacer llegar el informe médico que describe mi traumatismo.

Pero he empezado a sufrir una nueva disfunción. Se trata de sincopes; parece que a consecuencia del bloqueo del diafragma. Me pasa cuando me rio, sin llegar a la carcajada, también cuando toso mucho. Comienzo a tener convulsiones y varias veces he perdido el conocimiento, durante unos segundos, sentado. No me ha pasado nunca estando de pie. Pero siempre, parece que me despiertan de un sueño. En esas ocasiones, he dado un buen susto a mi mujer.

Pero no tiene más consecuencias y, elevando los brazos, consejo de un enfermo similar, se interrumpe el síncope.

En cualquier caso, mi situación actual, no me impide viajar. Ayer llegué de Zaragoza. Y he estado con amigos del alma, aparte de indagar más sobre esta bella ciudad, que tiene tanta historia.

Por cierto, ya hace un año que mantengo este blog. 😊

 

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Pedí que recabarais información sobre el filósofo Antony Flew. Con el propósito de que conocierais a esta figura del siglo XX, que fue uno de los máximos exponentes y defensores del ateísmo, durante 50 años. E incluso fue apodado el “padre del ateísmo”, por manejar siempre técnicas científicas, empíricas, para avalar sus teorías.

Pero, descubrió al final de su vida, utilizando siempre esos métodos, es decir, buscando la verdad, que la causa de que existiera vida inteligente en el universo, la llamemos Dios, Cosmos, Naturaleza, etc., necesariamente tendría que tener inteligencia. Bueno, esa idea es de Abdu’l-Bahá, pero este hombre, llega a la misma conclusión-

Y relató ese cambio de certeza, en su libro postrero, DIOS EXISTE. El cual recomiendo leer.

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RELATO

Mi viaje a Irán, dio mucho de sí. Estuve allí doce días. En Isfahán, otro lugar inolvidable que visitamos, fue uno de los puentes sobre el rio Zayanderud, construidos originalmente para que cruzaran las caravanas. Actualmente, en el parte inferior, debajo de algunas de las arcadas, se reúnen a diario, grupos de personas amantes de la poesía y la canción tradicional. Y, algunos, como nosotros, van a escuchar a esos cantores anónimos, que transmiten mucho sentimiento.

Efectivamente, fue una oportunidad única, en la que nos deleitamos con las melodías y, aunque no las entendíamos, era un placer escuchar esas voces cadenciosas y sentimentales.

Estuvimos un buen rato, a resguardo, en esas bóvedas, en las cuales reverberaban las gargantas, gracias a su curvatura. Algunos contestaban cantando a la melodía anterior y me recordó el tipo de poesía corta improvisada, cantada y con rima, propia de la cultura popular de Menorca: la GLOSA, donde un mínimo de dos protagonistas pugnan por “doblegar” al contrario.

Pero no me esperaba lo que ocurrió después. Un hombre, comenzó a cantar una balada que hizo que me conmoviera, hasta el punto de temblar de emoción.

Fue una experiencia muy personal, porque no la podía compartir con nadie, puesto que era una canción que cantan los bahá’ís persas que conozco.

Después de sobreponerme, le pregunté a Alí-Reza por esa melodía y me informó que era una canción muy popular en Irán.

Entonces, entendí que estaba confundido: no era una canción bahá’í, cantada por amigos iranís que viven en España, sino que era una melodía muy popular en ese país. Mis amigos aman a su país y a su cultura, aunque sean perseguidos allí.

Fue una tarde, en que mi sensibilidad, llegó a su plenitud.

Por cierto, los bahá’ís de todo el mundo (también de Ucrania), el pasado 21 de marzo, cuando llegó la primavera, celebramos el año nuevo.

Los iranís, lo celebran desde tiempo inmemorial, como un gran festival, una gran fiesta, para dar la bienvenida a la primavera y al año nuevo.

Nosotros, hemos adoptado esa celebración de convivencia, alrededor de una mesa bien provista que, además, marca el inicio de nuestro calendario y despedimos el mes de ayuno que hemos realizado justo antes, para prepararnos espiritualmente para el año que comienza.

Hasta la próxima.

Por cierto, habitualmente se dejan varios comentarios en el blog. Pero algunos no están firmados y no se puede contestar al no conocer al autor. Recordad hacerlo.